La farmacia que el presidente del Govern tiene en Marratxí supera con creces la media de ingresos por recetas de pensionistas de toda su competencia más directa. Las farmacias de Marratxí -ocho en total- facturaron de media al IB-Salut en 2012 por este concepto 526.342 euros, mientras que la botica de José Ramón Bauzá lo hizo por valor de 653.397 euros, lo que supone 127.055 euros más que el resto (un 24,1%).

En 2011, dicha facturación en la farmacia del presidente fue de 753.832 euros, frente a la media de los establecimientos marratxiners, que ese año se situó en los 584.767 euros, por lo que la diferencia fue aún mayor (169.065 euros).

Los datos oficiales de la conselleria de Salud los ha recapitulado y los hizo públicos ayer la diputada del grupo Més Fina Santiago -en la oposición-, quien además vinculó directamente la mejora del volumen de negocio de Bauzá a la apertura en 2008 de la residencia de ancianos Can Carbonell, muy próxima a su establecimiento. Hasta ese año, "la farmacia del señor Bauzá facturaba por recetas de pensionistas por debajo de la media de Marratxí, pero a partir de entonces sus ingresos se dispararon y pasó a hacerlo por encima de la media", resaltó Santiago, quien denunció que la decisión de ubicar el geriátrico "a 450-500 metros de la farmacia del presidente fue del propio Bauzá cuando era teniente de alcalde de Urbanismo de Marratxí". "Es un claro ejemplo de uso de la política en beneficio propio", remachó Santiago, que concluyó: "esto no puede ser".

La evolución de ingresos de la botica deja patente que hasta 2008 la facturación por recetas de pensionistas en la farmacia de Bauzá era inferior (entre 45.000 y 55.000 euros de diferencia en 2005 y 2006 respectivamente) al promedio de sus colegas en Marratxí.

Con todo, cabe señalar que la botica del presidente no es la que más factura de su municipio por medicinas para jubilados, ya que hay una que se lleva la palma en este sentido.

En 2012, la facturación por pensionistas baja en la farmacia de Bauzá a la par que la media de Marratxí, lo que Santiago atribuye "a la entrada en vigor del copago de medicamentos para pensionistas, que ha reducido la facturación al IB-Salut y que seguramente también contribuye a que se reduzca el consumo de medicinas, porque hay ancianos a los que su baja pensión que no les llega para pagar".

La diputada de Més afirmó que la residencia de ancianos próxima a la farmacia de Bauzá tiene a muchos usuarios dependientes y "es concertada", por lo que "no es tolerable que un centro sostenido con fondos públicos solo compre medicamentos a la farmacia del presidente del Govern, y no en las demás de Marratxí".

Por su lado, la diputada del PP María José Bauzá se preguntó "en base a qué datos" hace Santiago esta denuncia, puesto que "es imposible saber" si la residencia compra solo a Bauzá o no, "porque es de gestión privada y su gerencia elige la farmacia que quiere".