El impuesto turístico sale de su impasse y se aprobará el martes que viene o el siguiente. Eso sí, el dinero recaudado no se podrá destinar a levantar nuevas infraestructuras sociosanitarias, como pretendían los dos partidos en el Govern. Podemos votó ayer tarde con el PP y el resto de la oposición en bloque, por lo que PSOE y Més se quedaron totalmente solos en esta su demanda. Gracias a esa mayoría circunstancial se elimina la posibilidad de financiar esta clase de proyectos con el tributo que grava las pernoctaciones turísticas.

En el otro extremo, la noticia positiva para el tripartito es que ha logrado consensuar una fórmula para el reparto entre islas de los fondos que se recauden. Este pasa porque el 60% de los ingresos se distribuyan de forma proporcional entre las cuatro islas y en función de una horquilla de mínimos y máximos (a Mallorca le corresponderá entre el 42 y el 44,8%).

El 40% restante de las inversiones no estará sujeto a estos criterios fijados para el reparto, y lo decidirá una comisión de la que el Govern copará la mitad de miembros.

El gran desencuentro entre los tres partidos del Pacto radica en la firmeza de Podemos en vetar que se destinen los fondos ingresados también a paliar el déficit de residencias de ancianos y otros dependientes. El desmarque se produjo ayer en la comisión parlamentaria que dictaminó el articulado de la nueva ley.

El voto de los podemistas tumbó la balanza a favor de que se suprimiera del proyecto de ley aprobado por el Ejecutivo de PSOE y Més el punto que permitía dichas "inversiones de servicios públicos esenciales" con cargo a la llamada ecotasa. El resultado fue de 8 a 5, y una vez más el Govern quedó en minoría en esta legislatura. "No vemos la relación directa del turismo respecto a esto", justificó el diputado de Podemos Salvador Aguilera la negativa a respaldar a sus socios, lo que desembocó en una ´pinza´ con el PP, Ciudadanos y El Pi, que también se oponen a la demanda de socialistas y ecosoberanistas.

"Hay más de 800 personas dependientes que tienen derecho por ley a una plaza pública [en un centro o una residencia] y no se les puede dar" por falta de recursos, lamentó en su turno el diputado de Més Antoni Reus, quien dijo "no entender" el rechazo de sus aliados a esta medida. Finalmente Més hizo un voto particular que permite ahora que en el pleno vuelva a debatirse este aspecto, de modo que lo aprobado ayer no es aún definitivo. No obstante, hay muy pocas esperanzas de que Podemos varíe su postura en los próximos días. Su portavoz, Laura Camargo, dejó claro que no habrá rectificación.

PP: "Nace estrellado"

"El proyecto estrella del Govern nace estrellado", ironizó el parlamentario del PP Álvaro Gijón, quien vaticina "una pelea constante entre municipios para ver quién se queda con más parte del pastel".

Los tres partidos del Pacto sí han alcanzado un acuerdo global que finalmente desbloquea el impuesto turístico. Tras una mañana frenética en reuniones y contactos políticos, Podemos, PSOE y Més han cedido en sus pretensiones iniciales y finalmente han consensuado el articulado para la nueva ley que regulará el gravamen. La previsión es que la normativa pueda aprobarse en el pleno del martes que viene, y si no el siguiente a más tardar.

Los turistas empezarán a pagar el impuesto en los establecimientos hoteleros de Balears a partir del próximo uno de julio. Los partidos del Pacto votaron -esta vez sí unidos- a favor de una enmienda en este sentido presentada por El Pi, que pudo así salir adelante. Desde el Govern se considera que la propuesta por el partido de Jaume Font es una fecha "más realista" que las apuntadas hasta ahora por el propio Ejecutivo para la entrada en vigor de su proyecto estrella. Y eso que la propia presidenta Francina Armengol en la reciente ITB de Berlín anunció que el abono empazaría el uno de junio.