Las cuevas turísticas dels Hams y del Drach de Porto Cristo son de sobras conocidas en el panorama internacional desde hace décadas. Muchos años son incluso el principal atractivo de Mallorca, el que registra más visitantes. En esta zona del Llevant, desde tiempos inmemoriales hay ciudadanos que han venido advirtiendo de que con toda probabilidad existen muchísimos otros orificios por descubrir, escondiéndose pues bajo tierra auténticos tesoros patrimoniales. De hecho, el ruido de vacío bajo los pies que un considerable número de payeses y residentes en fincas de ´fora vila´ ha escuchado a menudo, constata que en el subsuelo habrá seguro cuevas, algunas pequeñas, otras de extraordinario tamaño.

Por ello, el proyecto de la nueva variante que desde hace semanas se ejecuta en Porto Cristo avisaba de que se deberían sortear cuevas, torrentes y ´xaragalls´, además de proteger tortugas. De momento ya se han descubierto dos orificios, a escasos metros de las cuevas dels Hams. Técnicos, espeleólogos y arqueólogos se han involucrado y no se descarta que salgan a la luz más cuevas y que el trazado de la carretera y el plazo de ejecución se vean alterados.

La UTE encargada está formada por Vías y Construcciones y Excavacions s´Horta. La empresa subcontratada Can Just, de Inca, se ocupa del desbroce y los cierres, y fue la que detectó la cueva objeto de mayor curiosidad. Al empresario Pedro Just le gustaría que a dicha cueva la identificaran a partir de ahora como ´den Just´.