Fieles a su cita, cientos de personajes fantásticos y de historias mágicas se congregaron ayer por la tarde en Alaró para dar forma a la trigésimo octava edición del desfile de carrozas de las fiestas patronales. De esta forma, personajes talayóticos, equilibristas de circo, reinas del carnaval carioca o superhéroes de cómic, todos de la mano, formaron la comitiva que este año desfiló ante un numeroso público que abarrotó la avenida de la Constitució y, sobre todo, la plaza de la Vila.

Y como a los personajes fantásticos no se les puede reclamar puntualidad ni darles prisas, el desfile de este año se caracterizó por su lentitud, tanto a la hora de dar la salida como de hacer el paseo. Más de una hora tardaron las seis carrozas inscritas para recorrer las primeras calles y asomarse a la plaza del Ayuntamiento. Y es que cualquiera convence a Batman o al hombre bomba de que agilicen el paso.

La primera carroza que tomó la salida, a las siete y media de la calurosa tarde de ayer, fue Nos vamos pa´ la feria, que ambientó una caseta sevillana para que niños y niñas pudieran vivir el desfile desde dentro.

Tras ellos llegó el momento de los Superherois, un proyecto que logró reunir a un importante elenco de personajes del cómic. Así que, de golpe, tomaron las calles Superman, las Supernenas, el Capitán América, la hormiga atómica y decenas de reyes del mundo fantástico. Una de las carrozas representaba la ciudad de Nueva York el 15 de agosto, y tras este remolque, llegó el Batmóvil con tracción a cargo de seis esforzados currantes.

A continuación, llegó el turno del mágico mundo del circo con Això és circ, una comparsa en la que uno podía toparse de golpe con la mujer barbuda, el hombre del sable, la bruja con la bola mágica o un conjunto de funambulistas. Además, representaron un mini circo a escala infantil para que los más pequeños pudieran ocuparlo tranquilamente.

En cuarto lugar, por orden de aparición, se presentó la colorista y rítmica Carnaval de Rio. Plumas, trajes brillantes y poca ropa fueron los elementos destacados de una comparsa que llenó las calles con su batucada. No faltó a su cita la reina del carnaval, que coronaba la carroza saludando y danzando.

La siguiente carroza que desfiló ante el público fue la del Oest, que como su nombre hacía presagiar consistió en un viaje al lejano oeste americano del tiempo de los pistoleros. El tema principal de este western fue la búsqueda y captura del alcalde de la localidad, por lo que repartieron hojas con la cara de Joan Simonet durante todo el trayecto. Llegados a la plaza, dos amables vaqueras invitaron al edil a bajar a pie de calle. De esta forma, lograron su objetivo.

La última concursante en tomar las calles fue Alaró, any 3000 aC, un recorrido por elementos del patrimonio histórico y natural del municipio, como la montaña de s´Alcadena, uno de los talaiots o la cueva dels Ossos.

El desfile contó con la ambientación musical de la banda de música de Alaró, aunque poco necesitaban las comparsas de acompañamiento musical, puesto que los equipos de sonido de cada carroza tenían suficiente intensidad como para silenciar cualquier instrumento.

Sobre las nueve y media de la noche el jurado ya se había reunido y comenzó la lectura de los premios 2011. La ganadora fue Superherois, cuyos componentes saltaron y llenaron de jolgorio la plaza durante la larga noche que comenzó tras el desfile.

El segundo lugar correspondió al mundo talayótico de Alaró 3000 aC, que también se llevó el premio Joan Campaneter, el galardón a la carroza que mejor representó un tema local. El Carnaval de Rio fue la tercera clasificada, seguida del Oest, Això és circ y Nos vamos pa´ la feria.