El Ayuntamiento de Sóller reparó una avería en la red de alcantarillado del municipio. Estos desperfectos en el saneamiento municipal provocaron la contaminación del agua de riego de la parte baja de Sóller. Como consecuencia, durante los dos últimos días han muerto de centenares de peces en diversas albercas de las fincas del pueblo.

El caso permanece bajo la investigación del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil. El incidente salió a la luz el pasado domingo, cuando el propietario de un huerto situado en la zona de Son Puça de Baix, Ramon Oliver, denunció ante el Seprona el vertido de aguas contaminantes en la red de acequias de los regantes del valle.

Esta fuga de aguas residuales provocó un grave impacto ecológico, por lo que Seprona inició las pesquisas de inmediato.

Los agentes constataron en seguida que el vertido provenía de una fuga en la red de alcantarillado de Sóller.

El dueño de la finca manifestó también que su estanque –de 300.000 litros de capacidad– apareció el domingo por la mañana con todos sus peces muertos. El propietario tenía más un centenar, entre los cuales había cincuenta carpas y ocho anguilas.

Horas después de poner el caso en conocimiento de la Guardia Civil y del Sindicato de Riegos, los efectivos de la Benemérita localizaron el origen del vertido. Las aguas residuales provenían del interior del torrente Major, en el tramo que fluye por un túnel subterráneo bajo la plaza del Mercat.

Según expuso Ramon Oliver, el dueño de la finca afectada, el agua residual es conducida hasta una acequia que recoge el agua del torrente. Desde allí se canalizan todos los fluidos hasta el Gorg d´en Bessó. Luego se mezcla con la de la fuente de s´Olla y el agua reciclada de la estación depuradora de Sóller.

Los agentes del Seprona tomaron muestras del agua del estanque y del punto donde se localizó el vertido con el fin de analizarlas y comparar las sustancias contaminantes que puedan contener.

El dueño del huerto manifestó su preocupación. "Ahora tengo 300.000 litros de agua contaminada que habrá que tratar. La tierra estará contagiada. Posiblemente también se hayan dañado un pozo y los árboles frutales por culpa de este agua", añadió el afectado.

Por último, Oliver explicó que "la semana pasada el Ayuntamiento de Sóller fue informado del vertido y no hizo nada". "El uso de agua de la depuradora de Sóller ha provocado las quejas de los regantes de la parte baja del pueblo", concluyó. Una vez reparado el alcantarillado, los regantes del valle esperan que no se repita otro episodio similar de contaminación.