El pasado día 25 se abrió oficialmente la veda de la llampuga (dorado, en castellano) y algunos pescadores profesionales salieron a por ella; pocos de momento. Lo que sí fue realmente espectacular fue la salida ayer de centenares de embarcaciones deportivas desde Port de Pollença, Alcudiamar y desde el Port del Cocodrilo, también en Alcúdia, con los aparejos de fluixejar. Y es que la noticia de que ya han aparecido las primeras llampugues en el mercado –a una media de 14 euros el kilo– ha dado el pistoletazo de salida a los aficionados que apuran sus últimos días de vacaciones.

El que avisa no es traidor

Los propietarios de algunas fincas próximas a la carretera que une Santa Margalida y Maria han instalado unos letreros que anuncian que se han tratado los viales con productos para matar la hierba. Incluso especifican hasta cuándo el veneno permanece activo. Una medida muy prudente, aunque personalmente pienso que estaría mejor segar la hierba y así no habría peligro. También entiendo que sería mucho más caro.

¡Qué tiempos aquellos!

Que época tan feliz la de hace cuatro meses. Fueron días en que todo eran parabienes y promesas. Los candidatos del PP se reunían ante el hospital de Inca y anunciaban su ampliación. Pero pasaron las elecciones y ahora se dice que ya no se abrirá ni el nuevo PAC. Siempre nos quedará el recuerdo y a esperar a que llegue noviembre para escuchar el mismo discurso.