Un dictamen firmado el 25 de agosto por diversos técnicos del departamento de Cultura y Patrimonio del Consell informa de forma desfavorable a la instalación de la estatua de Jaume II inaugurada a finales de mayo en la plaza de la iglesia de Sineu por el impacto que provoca en el conjunto histórico declarado como BIC en el que está situada y porque se instaló "sin la autorización pertinente", por lo que insta al ayuntamiento ´sineuer´ a retirar la escultura y devolver a la plaza su aspecto original.
El informe fue hecho público ayer por el grupo de consellers del PSM-IniciativaVerds-Entesa en el Consell, coalición que acusa al PP insular de "esconder deliberadamente" el documento que "se pronuncia de forma clara y contundente" contra la ubicación de la escultura en la plaza. Según los nacionalistas, el dictamen "debería haber sido aprobado en la última reunión de la ponencia técnica de Patrimonio Histórico, pero la dirección insular de Cultura y Patrimonio retiró este punto del orden del día". En este sentido, el portavoz de la coalición, Joan Font, explicó que estarán "atentos" a la posible aparición de nuevos informes que contradigan el citado dictamen técnico.
Además, los nacionalistas relacionan esta cuestión con el hecho de que el actual secretario técnico del departamento de vicepresidencia de Cultura, Patrimonio y Deportes del Consell, Miquel Barceló, firmó un informe el 26 de mayo en el que se autorizó la colocación provisional de la base de la estatua porque "no supone ningún daño al conjunto histórico de Sineu". Era una decisión condicionada a la presentación de la documentación técnica por parte del ayuntamiento de Sineu en un plazo de dos meses.
La coalición nacionalista denuncia un "trato de favor" del Consell hacia el ayuntamiento de Sineu, porque "no se ha abierto ningún expediente sancionador" a pesar de que la estatua se colocó sin autorización. Font exigió al Consell que la próxima ponencia técnica eleve a votación el expediente para que "se decida en base a los informes técnicos". Por su parte, Miquel Gelabert, de Sineuers Independents (SI), afirmó que en esta cuestión "se ha obviado la documentación previa" y añadió que en los temas patrimoniales "deben ser los técnicos quienes decidan y no los políticos".
La versión del Consell
La directora insular de Cultura y Patrimonio del Consell, Gari Durán, aseguró ayer que el único motivo por el cual el expediente de la estatua de Sineu no se ha elevado a la ponencia técnica ni a la comisión política es la carga de trabajo de estos organismos y el hecho de que todavía se sometan a votación expedientes del año 2010, que son "prioritarios", según la directora insular.
En cualquier caso, Durán precisó que el informe técnico sobre la escultura de Jaume II "podría ser votado de forma desfavorable en la ponencia técnica", ya que "los informes de los técnicos no necesariamente van a misa".
La alto cargo del Consell ironizó sobre la "rapidez" de los técnicos de la institución a la hora de elaborar el dictamen sobre un tema que no figura aún en ningún orden del día de la ponencia, por lo que insinuó un posible "uso perverso de la Administración" por parte del exconseller de Cultura y Patrimonio y actual portavoz de PSM-IV en el Consell, Joan Font, quien "habría hecho uso de su ascendencia sobre algunos técnicos para que se llegase a esta conclusión (en el informe)".
