El grupo municipal del PP se quedó solo en el pleno de ayer en el que se aprobó eliminar del organigrama del Ayuntamiento de Sóller siete de las diez plazas de los trabajadores que despedirán. La oposición, que se postuló en contra, sugirió rebajar los pluses a los funcionarios y eliminar las dietas a los concejales.

Catalina Esteva, portavoz de PS, señaló que el recorte debería haber sido analizado mediante la revisión del organigrama con motivo de los presupuestos de 2012, al tiempo que criticó el "sistema y los criterios" para llevar a cabo el recorte de la plantilla efectuado en los últimos días.

Por su parte, desde las filas de ES, Miquel Gual se hizo partícipe de la situación por la que pasa el ayuntamiento "por lo que el recorte debería haber sido una cuestión de estado en la que deberíamos haber participado todos los grupos". Afirmó que el PP, "funcionarios y políticos deberíamos hacer un esfuerzo para evitar los despidos" y, por ello, sugirió que se eliminaran los pluses de productividad y las dietas.

Esta última propuesta también fue compartida por el PSOE que, en boca de Josep Lluís Colom, propuso la retirada de las dietas que perciben los 17 ediles además de algunos de los pluses de los trabajadores. Criticó la forma en la que el PP ha llevado el recorte "porque peligra la estabilidad de algunos negociados".

Desde el equipo de gobierno, el alcalde Carlos Simarro (PP) afirmó que el recorte fue informado a los sindicatos y cada uno de los afectados de forma individualizada. Simarro recordó a la oposición que "además de dar la cara hemos aplicado lo que ustedes aprobaron". El munícipe pidió "coherencia" a los antiguos componentes del pacto de progreso.