Se esperaba en la noche de ayer elevada asistencia de público al tratar el pleno relevantes asuntos urbanísticos y haber sido apartada esta semana la secretaria, y así fue. El público llenó la sala y se trataron múltiples temas de interés. Destaca la aprobación del Plan especial del Camp Lladó, sin el voto del alcalde, Tomeu Lladonet (Convergència) al tener familia implicada, contemplando un crecimiento urbano. El pacto formado por PP y CxI aseguró a la oposición que el plan mantiene que los beneficiarios, sobre todo por la revalorización de terrenos, asumirán de su propio bolsillo los servicios de aceras, asfaltado, aguas y alumbrado.

Otro tema urbanístico controvertido, sobre las ocupaciones de isletas de la zona residencial extensiva baja de la Colònia, fue retirado del orden del día.

El Ayuntamiento sí dio luz verde a que se saquen a concurso los servicios de cementerio y tanatorio, para que una empresa privada los gestione y explote. La oposición lamentó que sus propuestas no fueran atendidas en su momento, viéndose derogado ahora lo que se aprobó en enero.

Asimismo, Nous Independents Locals, liderado por Tolo Galmés, instó a los gobernantes a buscar una solución para poder subvencionar el comedor escolar, que ha pasado de hacer pagar 5 euros a 7,65, "más caro que ir a la residencia-club de mayores que está subvencionada e incluso va gente de fuera del municipio de ses Salines". El exalcalde Juan Burguera (PP) se ocupa de la gestión.

La plaza Molí de sa Sal fue objeto de debate por partida doble. Por un lado, el pacto aprobó que la nueva concesión de explotación del chiringuito cueste 4.500 euros al año, cuando en la última concesión eran 8.000 (plazo total de diez años). NIL pidió sin éxito que se fijase un coste de 12.000.

Por otra parte, el Ayuntamiento intentará que Costas asuma el elevado gasto (varios cientos de miles de euros) de la discutida expropiación forzosa de los terrenos de la plaza Molí de sa Sal, propiedad de la marquesa del Palmer, María del Pilar Dezcallar Machimbarrena.

Otro tema urbanístico importante para el núcleo de la Colònia es la solicitud de eliminación de la zona de protección del Plan territorial de Mallorca que afecta al crecimiento de la población incluyendo terrenos municipales.