La apertura de una planta asfáltica en la zona de Son Corb, en Sineu, está cada vez más cerca. La semana pasada la Comisión Balear de Medio Ambiente dio luz verde al proyecto que impulsa la empresa Matías Arrom Bibiloni. La noticia ha sentado como una jarra de agua fría al Ayuntamiento de Sineu, que está totalmente en contra de que se lleve a cabo el proyecto. El alcalde del municipio, Pere Joan Jaume (PP), explica que "el consistorio y la Federación de Entidades Locales de Baleares (FELIB) fuimos los únicos miembros de toda la comisión que votamos en contra del proyecto, realmente una pena por el gran perjuicio medioambiental que supone".
El proyecto que se quiere llevar a cabo contempla la instalación de un aglomerado asfáltico en la cantera de Son Corb, aprovechando el material y las sinergias que se han producido hasta la fecha en dicha cantera. La resolución positiva de la Comisión Balear de Medio Ambiente choca con la postura que sólo un año atrás defendían los técnicos del departamento de Urbanismo del Consell de Mallorca, quienes redactaron un informe desfavorable sobre la instalación de la planta asfáltica en el municipio. Según los técnicos del Consell, "el proyecto incumplía la norma 17 del Plan Territorial de Mallorca, ya que la actividad se situaría en suelo rústico común".
La empresa recurrió y señaló que "la petición de instalación de la planta asfáltica estaba amparada por la Ley de Medidas Urgentes para el impulso de la inversión en Baleares y que el 95% del material utilizado era árido procedente de la cantera y el restante, un 5%, era betún". Ahora la Comisión Balear de Medio Ambiente le da la razón, ya que asegura que la planta de aglomerado asfáltico puede ser considerada "como de beneficio de un recurso minero".
Preocupación
En el consistorio se muestran preocupados con su construcción tanto por "el daño visual que aportaría a un municipio declarado BIC como Sineu, como por la emisión de partículas nocivas para la flora y la fauna" que hay en el entorno de la planta, hecho que creen "podría poner en peligro también la salud de los sineuers".
No obstante, por ahora el ayuntamiento no planea tomar ninguna medida al respecto. El concejal de Medio Ambiente, Pere Joan Mestre (Cxl), asegura que "si un organismo tan vinculante y de peso como la Comisión Balear de Medio Ambiente le abre las puertas, nosotros no tenemos nada que hacer".
Los vecinos del municipio se volcaron hace ahora justo un año en una campaña de recogida de firmas para pedir que la planta asfáltica no llegara a ser una realidad, movimiento que recogió 864 apoyos. El Ayuntamiento de Sineu no fue el único que se mostró en contra del proyecto: se les sumaron el municipio de Sant Joan, el GOB y los vecinos de la Serra Morena. Tanto el GOB como los vecinos presentaron alegaciones al proyecto ya que consideraron que "se pretendía legalizar y continuar teniendo beneficios sobre una actividad situada ilegalmente en suelo rústico cambiando su ubicación y afectando un espacio ya muy degradado".
No es la primera vez que se oye hablar de la construcción de una planta asfáltica en Sineu. Hace años se intentó llevar a cabo un proyecto similar pero la presión popular fue efectiva entonces.
