El Ayuntamiento de Sóller ha remitido al Consell el expediente de modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para su aprobación definitiva, que el municipio ha tramitado con el fin de que se puedan habilitar albergues juveniles.

La propuesta tuvo el apoyo de todos los partidos de la corporación municipal, que no objetaron contra esta iniciativa que pretende dinamizar el turismo juvenil de albergues en el municipio.

La modificación del planeamiento urbanístico surgió después de que los propietarios de la casa de Can Ballester, situada en la plaza dels Estiradors, solicitaran el permiso municipal para reconvertirlo en un albergue juvenil.

Fue entonces cuando los técnicos municipales se percataron que no podían dar licencia a lo que habían solicitado. La actual normativa urbanística no permite su construcción, por lo que los técnicos iniciaron la modificación del PGOU para que este tipo de equipamientos puedan crearse en el casco urbano de la ciudad.

Cuando los cambios estén en vigor, los dueños de Can Ballester podrán llevar a cabo la remodelación del edificio para su conversión en un albergue juvenil. Será el primero de estas características que habrá en el municipio de Sóller, un hecho que fue calificado como positivo por el ayuntamiento al considerarlo como una forma de atraer un nuevo segmento de turismo hasta ahora inexistente en el valle.

Además de las numerosas modificaciones puntuales del PGOU de 1998 que está tramitando ahora el ayuntamiento, el departamento de Urbanismo, que dirige el concejal Gabriel Darder (PP), trabaja en la redacción de un nuevo planeamiento para sustituir el actualmente en vigor. Según el equipo de gobierno, su aprobación no llegará antes de los dos años.

El mismo pleno que dio el visto bueno a los albergues juveniles también acordó por unanimidad suprimir la zona de previsión hotelera que el plan urbanístico preveía en unos terrenos municipales situados junto a la playa de Can Repic.