Los plenos de la junta de distrito de Colònia de Sant Jordi (municipio de ses Salines), caracterizados por la participación activa de vecinos en particular y representantes de asociaciones y colectivos diversos, vivieron anteayer su episodio de tensión. Durante el debate sobre la mala calidad del agua potable suministrada, el presidente de la junta de distrito, Juan Rodríguez (PP), y el presidente de la Asociación de vecinos, usuarios y consumidores de ses Salines y la Colònia, Jaume Pou, mantuvieron un rifirrafe. La discusión fue subiendo de tono y Rodríguez hizo varias advertencias a Pou, a quien finalmente le negó el derecho a hacer más intervenciones. Pou abandonó la sala afirmando: "Me voy a ver la comedia a otro sitio".

En declaraciones ayer a este diario, Pou lamentó que le acusaran de "crear alarma social" y de ser "planfetista". Recordó que fue la propia Mancomunitat Migjorn d´Aigües la que recientemente informó de una elevada concentración de cloruros y sodio en la red pública, lo que la ha llevado a desaconsejar su consumo habitual por vía oral y para el uso culinario, sobre todo entre colectivos como ancianos, embarazadas o niños. De hecho, este periódico publicó el pasado 21 de agosto la noticia referente al informe de la mancomunidad que cubre los municipios de Campos y ses Salines.

Asimismo, cabe apuntar que desde hace años tanto particulares como partidos políticos y medios de comunicación vienen denunciando descomunales fugas diarias de agua y la falta de depósitos en condiciones.

En el pleno de la junta coloniera gobernantes y un técnico de Sorea (empresa encargada en ses Salines) dijeron que no hay motivo para la alarma y finalmente se acordó redactar un escrito entre todos los partidos a fin de exigir a la mancomunidad que espabile, mejore las condiciones de la red, se construyan nuevos depósitos y se garantice agua de calidad.

Pou remarcó que mientras él sea presidente seguirá defendiendo los derechos de los ciudadanos. El facebook de la entidad casi a diario publica denuncias, propuestas y noticias diversas.

Por otra parte, el equipo de gobierno de centroderecha impulsa una nueva reducción del impuesto por la ocupación de la vía pública, en concreto de un 10%. Para este 2012 ya lo rebajaron un 20%.

La Associació Vell Marí y Sud Unificat sostuvieron que sería mejor bajar o no subir más impuestos como el IBI, incrementado este año entre un 6 y un 12%. La medida beneficiaría a toda la población, bares, restaurantes y otros negocios incluidos, indicaron.