Las piscinas municipales de Son Angelats entrarán en funcionamiento el próximo 1 de noviembre, por lo que a partir de ese día los sollerics podrán abonarse a los servicios que ofrecerá el recinto deportivo. El alcalde de Sóller, Carlos Simarro (PP), informó que los trabajos de subsanación de deficiencias están llegando a su recta final lo que hará factible que a finales este mes el recinto pueda abrir unos días al público en unas jornadas de puertas abiertas.

Los trabajos que se han llevado a cabo durante las últimas semanas han consistido principalmente en resolver una larga lista de deficiencias estructurales que los técnicos municipales recogieron en un informe. Las más flagrantes, las más de cuarenta de goteras que tenía la cubierta, los problemas de evacuación de aguas en los vestuarios, grietas en las paredes o la oxidación de algunas partes metálicas de la estructura. Las reparaciones suponen un coste de 157.000 euros que se sufragan con el aval que depositó la empresa que construyó el polideportivo el año 2007. A partir de la apertura del polideportivo la concejalía de Juventud y Deportes se mudará al pabellón, según anunció el propio alcalde que también señaló como próximamente el municipio sacará en alquiler las instalaciones del bar y los demás servicios deportivos que dispone el equipamiento, como el gimnasio.

En cuanto al futuro funcionamiento de las piscinas, el alcalde confía en que su sostenimiento económico provenga de los abonos de los usuarios así como de la recaudación del servicio de ORA de Sóller. Señaló que "actualmente hay 700 personas que van a las piscinas de Palma" aunque reconoció que para su autofinanciación el equipamiento necesita que unas 1.500 personas se abonen a las piscinas. "Por eso se han estipulado unos precios más que razonables", aseveró Carlos Simarro.

A la pregunta de qué pasará si no se consiguen abonos suficientes, el alcalde dijo que "si las piscinas no funcionan porque no hay abonados, indudablemente se cerrarán".