La esperada reforma de la fachada y parte del campanario de la iglesia parroquial de Santa Maria de Sineu deberá esperar algo más de tiempo, después de que el Consell de Mallorca haya reclamado al obispado de la isla nuevos estudios y una propuesta de intervención "más definida" antes de autorizar el proyecto definitivo.
La comisión de Patrimonio Histórico de Mallorca, reunida ayer en sesión ordinaria, únicamente autorizó al obispado el montaje de andamios en la fachada del templo de origen gótico para "seleccionar los lugares más adecuados para realizar la toma de muestras". En concreto, la institución insular reclama un análisis "más a fondo" del grado de deterioro de la fachada "para definir con más exactitud las actuaciones necesarias".
Las nuevas analíticas deberán incluir un estudio sobre los materiales constitutivos de la fachada, las pátinas, las sales y las policromías del reloj de sol de 1664, así como un ´mapping´ del lugar de extracción de la muestra. Además, el obispado deberá presentar un apartado específico para la reforma del citado reloj de sol del siglo XVII situado en la fachada de la iglesia parroquial.
La reforma del templo de Sineu, levantado en el siglo XIII, es una antigua aspiración de la parroquia de la localidad del Pla, que ha conseguido recaudar el dinero suficiente para acometer el proyecto a base de cenas y actos solidarios. El proyecto tiene un coste aproximado de 130.000 euros y se centrará en la fachada principal, el llamado ´pontet de Santa Bàrbara´, que conecta el edificio religioso con la torre del campanario, y la parte inferior de esta torre.
La iglesia de Sineu fue declarada Bien de Interés Cultural (BIC) en el año 2003, y está ubicada en el centro del casco histórico de la localidad, que también tiene la consideración de BIC por su riqueza arquitectónica y valor histórico.
En los diferentes informes presentados por el obispado al Consell se destaca el elevado nivel de deterioro de los diversos elementos que componen el templo. La fachada principal presenta fisuras a causa de los problemas estructurales del edificio.
Sin embargo, antes de autorizar la reforma, el Consell requiere documentación complementaria debido a las características del inmueble, "uno de los templos góticos más relevantes de la Part Forana de Mallorca".
