UNA TREINTENA DE SOCIOS DE LA TERCERA EDAD DE SÓLLER participaron en unas matanzas en las que elaboraron unos 200 kilos de embutidos a partir de la carne que les proporcionó un cerdo. La actividad se desarrolló durante toda la mañana de ayer y que, lógicamente, incluyó una merienda de matanzas en la que no faltaron los embutidos.