La planta cementera de Lloseta estuvo a punto de cerrar hace uno año debido a la crisis del sector de la construcción, reconocen fuentes autorizadas de la multinacional Cemex. Sin embargo, la apertura de nuevos mercados nacionales y extranjeros ha posibilitado el mantenimiento de la fábrica. El año pasado se inició la exportación de cemento a países del Magreb con un porcentaje del 30% de la producción. Para este ejercicio se espera llegar al 40%.
José Antonio Cabrera, nuevo delegado de Cemex para Balears confirma que "en estos momentos está garantizada la pervivencia de la planta y se encuentra a un esperanzador nivel de trabajo". Mientras que en otras factorías del grupo han tenido que reducir plantillas en aproximadamente un 20% la fábrica de Lloseta ha padecido sólo el recorte del 10%.
De las ocho plantas cementeras que Cemex posee en España, sólo continúan con la producción las de Alicante, Mallorca y Zaragoza, el resto se han reconvertido en plantas de tratamiento final o distribución.
Mallorca está suministrando cemento, en estos momentos, a Eivissa, Menorca, Cataluña, Ceuta, Melilla y a países del Magreb. La producción anual de la planta llosetina es de 300.000 toneladas, de las cuales 120.000 se venderán en países del norte de Africa.
Cabrera explica que "se ha establecido allí un equipo permanente de la empresa que está trabajando en la apertura de sus mercados". Según el responsable del grupo en Balears, "existe una fuerte competencia extranjera, incluso de países asiáticos, que están desembarcando con sus productos".
Calidad
La excelente calidad del cemento que se produce en Lloseta es una de sus principales bazas. "Se trata de un mercado emergente, pero que como en todas partes valora la relación calidad y precio", indica Cabrera.
Para exportar el producto se ha tenido que adaptar la ensacadora de la planta pues, mientras que en España el máximo permitido son sacos de 25 kilos, el mercado Africano demanda sacos de 50 kilos.
También se ha construido una nueva nave de almacenaje que comparte el producto finalizado con algunos minerales usados como materia prima. Los sacos de 50 kilos se embalan en palés equipados con bragas para su izado, pues todo el transporte se hace por vía marítima.
Transporte
Cabrera destaca la "muy buena comunicación de la planta por carretera con los dos principales puertos de Mallorca: Alcúdia y Palma", así como "las infraestructuras para efectuar las operaciones de carga y descarga en ambos puertos".
Javier Fuertes, director de marketing, sostenibilidad y comunicación de Cemex, insiste en que "la recuperación ha sido posible gracias a todo un trabajo de reestructuración que en el caso de Mallorca ha agrupado bajo un mismo equipo las diferentes divisiones que teníamos: áridos, canteras y fábrica". El responsable de la empresa indica que "la crisis había puesto en el punto de mira a la fábrica de Lloseta. Sin embargo, la compañía ha apostado por ella y en estos momentos produce todo lo que se vende en las islas y está exportando".
