El gobierno en minoría del PSM en el ayuntamiento de Petra corre serio riesgo de ser desbancado. El PSOE, en la oposición con la regidora Maria Antònia Alzamora, amenazó en el pleno de anteayer a los nacionalistas con presentar próximamente una moción de censura. En las elecciones de mayo de 2011 el PSM ganó pero no logró la mayoría absoluta. El resultado fue de cinco concejales para el PSM; cuatro, PP; uno, PSOE, y uno Convergència.

El PSM negoció sin éxito con PSOE y Convergència para tener un gobierno estable, y en lo que llevamos de legislatura ha habido muy pocos acuerdos entre la izquierda. En cambio ha llamado la atención muchas veces la sintonía entre PSOE, PP y Convergència.

En el pleno de anteayer el PSM volvió a defender su trabajo: "Nos toca gobernar y tomar decisiones", afirmaron la alcaldesa, Catalina Mas, y el concejal Sebastià Reixac, quienes reiteraron que con el único partido que no quieren negociar es con el PP "porque no nos ha consultado ni a la hora de aprobar drásticos recortes o el cierre unilateral de Can Real, y además está atacando y perjudicando como nunca a la lengua catalana".

Por su parte, la oposición critica que el PSM "gobierna como si tuviera mayoría, y se equivoca". El PSOE presentó anteayer una moción que recibió el respaldo de PP y Convergència para exigir al PSM que cumpla los acuerdos aprobados por el pleno. Alzamora reclamó "más transparencia y que los concejales de cada área expliquen al pleno sus acciones, como mínimo una vez cada tres meses".

Lluís Grimalt, de Convergència, sostiene que en las negociaciones para alcanzar un pacto han de sentarse "todos los partidos".