Can Prunera, el museo de arte modernista que impulsó Javier Mayol, acogió anoche un cálido homenaje hacia su figura seis años después de su muerte. En los jardines del casal fue descubierta una placa en recuerdo a quien también fuera presidente del Ferrocarril de Sóller. Numerosos familiares, invitados y personalidades de la vida cultural y social se acercaron a Can Prunera para participar en este sentido acto enmarcado en las tradicionales fiestas de Sóller en honor a Sant Bartomeu.