Los comerciantes de la plaza del mercado de Sóller asumirán de su bolsillo la subsanación de diversas deficiencias que presenta el edificio tras haber sido reformado en 2011. La asociación que engloba a los vendedores asumirá el coste de repintado interior del edificio, maltrecho durante la reforma, y la instalación de una nueva iluminación interior.

El presidente de los comerciantes, Josep Valls, explicó que estos trabajos serán asumidos por la asociación tras haberlo solicitado al ayuntamiento desde hace dos años sin haber conseguido resultados satisfactorios. Explicó que los vendedores asumirán la aplicación de una capa de pintura en el interior del recinto municipal. La pintura existente se encuentra en mal estado tras la reforma de la cubierta, puesto que el edificio estuvo meses sin tejado. En un principio los comerciantes esperaban que bien la constructora o el ayuntamiento se hicieran cargo de repintar el edificio. "Al final lo haremos nosotros", afirmó decepcionado Valls.

Del mismo modo, los vendedores pagarán de su bolsillo la instalación de un nuevo sistema de iluminación del mercado. El cambio debía haber sido asumido por la empresa que realizó la obra pero los trabajos no llegaron a materializarse. Por su parte, el ayuntamiento asumirá la instalación de los andamios, la reparación de las ventanas y la instalación de unos paneles de metacrilato en unas rejillas de ventilación donde se cuela el agua de lluvia.

Goteras

El mercado municipal fue objeto de una reforma por valor de más de 300.000 euros con la que se renovó por completo su cubierta. Toda menos en un tramo donde la empresa "se olvidó" de sustituirla y por donde hay importantes goteras, explicó Josep Valls.

Las filtraciones procedentes del techo impiden que se puedan instalar los puestos de venta de pescado donde preveía el proyecto de reforma.

El ayuntamiento ha iniciado los trámites para exigir que la cubierta sin sustituir sea renovada por la contratista que ejecutó la reforma.