Los pescadores del Port de Sóller se sienten indignados con el Govern porque tras casi diez años de espera todavía no han conseguido que la administración le construya la lonja prometida en el año 2005.

Jaume Enseñat es un viejo pescador que posee una embarcación de bou y se lamenta "de lo abandonado que estamos los pescadores de Sóller", porque "tenemos que trabajar en unas condiciones totalmente tercermundistas".

El caso es que el Govern derribó en 2005 sus antiguas instalaciones con el fin de llevar a cabo la remodelación de la zona portuaria. La administración derribó el edificio que albergaba la lonja y los almacenes donde los pescadores guardaban sus redes y artes de pesca. Y, como recuerda Enseñat, "lo hicieron con la falsa promesa de que después nos construirían un edificio para nosotros, y todavía esperamos". En todos estos años, los pescadores han visto reducido su espacio de trabajo y sus condiciones laborales "se han visto muy mermadas". Según explica Enseñat, "no tenemos un lugar digno para guardar las redes y las artes de pesca porque lo que nos dejaron no sirve para nada".

Contenedores metálicos

Tras la reforma de la zona portuaria, el Govern les instaló unos contenedores metálicos provisionales "en los que no podemos almacenar las redes porque en verano en su interior se alcanzan los 80 grados y se nos funden incluso las redes", asegura este pescador. Además tampoco tienen un lugar "digno" para trabajar en la reparación de las artes de pesca.

"En verano tenemos que hacerlo a pleno sol y en invierno al frío, porque no tenemos ningún lugar en condiciones para hacerlo", señaló Jaume Enseñat, quien se lamentó que "no es de extrañar que aquí en Sóller la pesca sea un oficio que vaya a menos".

Antigua reivindicación

Los pescadores vienen reclamando desde hace años la construcción del edificio prometido por el Govern "para acabar con esta situación tan tercermundista y deplorable que tenemos", pero todavía no saben cuándo será "a pesar de todas las promesas que nos han hecho".

"Queremos unos almacenes y una pequeña lonja donde podamos vender pescado dignamente", señaló Enseñat.