Los productores de cordero de calidad de Pollença, una de las marcas representativas y carismáticas de Mallorca, están notando una recesión importante que Francisco Úbeda, gerente de la cooperativa local, sitúa en torno al 2% de decrecimiento. El volumen de negocio de este año se está situando en torno a los 360.000 euros que se traduce en la venta de unas 7.000 canales de cordero aproximadamente. Cabe destacar que falta un mes para cerrar el ejercicio y que precisamente aún falta la campaña de Navidad.
A pesar de ello los ganaderos no confían que el resultado varíe respecto de la tónica del año. Úbeda precisa que "no se ve alegría en el mercado y estamos notando que el con sumo de cordero de calidad ha decrecido en favor de otro cordero a precio más barato".
Los productores tienen puestas su esperanzas en que el centro de tipificación, que están construyendo en la actualidad, les permita obtener precios más competitivos en el mercado peninsular. Úbeda indica que "el mercado local es el que es; si queremos obtener más rentabilidad tiene que ser abaratando costes o abriendo nuevos mercados. Nosotros nos hemos planteado las dos cosas".
El técnico destaca que "por ejemplo la piel del cordero se paga a doce euros en Extremadura cuando aquí nos la pagan a dos euros. El objetivo es obtener buenas pieles y venderlas fuera. La lana se paga allí a 1,50 euros el kilo y aquí a una tercera parte".
Menos corderos
Además, cabe destacar que este año ha habido menos nacimientos que el anterior. La sequía y condiciones meteorológicas adversas en general son las causas que apuntan los productores para explicar la menor producción. Úbeda, agrega que "eso nos hace temer que en primavera tengamos un atasco, pues siempre a una época de pocos nacimientos sucede otra de exceso". Sin embargo, el técnico espera que "en tres meses se hayan finalizado las obras del centro de tipificación y "ya se podrá ofrecer un producto mucho más homogéneo, evitando la entrada en el mercado de corderos que deberían descartarse y devolverse a engorde".
Esta situación es uno de los inconvenientes que acontecen en la actualidad. Los corderos son seleccionados en las fincas y con un método rudimentario puesto que a veces se pesan y otras se recogen a ojo. Eso hace que en algunos lotes haya corderos de un peso mayor o menor al pedido. Úbeda explica que "funcionando el centro de tipificación eso no sucederá puesto que los corderos pasarán por una manga de selección, con una báscula precisa, y los que vayan al matadero cumplirán todos con los requisitos especificados. Los descartados podrán pasar a un departamento de engorde donde se finalizará su crianza o serán devueltos a la finca de origen".
Visita
Precisamente, el conseller de Agricultura, Medio ambiente y Territorio, Gabriel Company, visitó ayer las obras del nuevo centro de tipificación del cordero de la Cooperativa Pagesa de Pollença. Al acto también asistió el alcalde de Pollença, Bartomeu Cifre, el presidente de la Cooperativa, Martí Solivellas, y diferentes productores miembros de la entidad.
El centro en construcción ocupa una superficie de 7.000 metros cuadrados y ha supuesto una inversión de 700.000 euros sufragados por la Cooperativa, de los cuales 200.000 corresponden a una subvención de fondos europeos.
El conseller Company explicó que "estas nuevas instalaciones, pioneras en Mallorca, permitirán reunir el ganado de la Agrupación de Productores de cordero de Pollença para clasificarlo en lotes homogéneos en función del canal de comercialización y así poder defender mejor su precio".
Company quiso "agradecer el esfuerzo del sector para ser más competitivo y adecuarse a un mercado en evolución constante, a pesar de las trabas administrativas que los productores se encuentran por el camino y a la hora de construir centros especializados y que con la nueva Ley agraria, que hoy está previsto que se apruebe en el Parlament, se intentarán suprimir". Al finalizar la visita efectuó una degustación de carne de cordero mallorquín.
