Representantes de la asociación de vecinos de la urbanización George Sand de Valldemossa y del equipo de gobierno municipal mantuvieron recientemente una reunión para tratar las quejas vecinales acerca del mal estado de conservación de esta zona residencial en plena Serra de Tramuntana.

La delegación vecinal arrancó una serie de compromisos de los representantes municipales, entre los cuales figura la promesa del Ayuntamiento de que "priorizará el chequeo" del alumbrado público de George Sand.

La administración responde así a una de las preocupaciones expresadas por los vecinos. Tal y como ya informó este diario, alertaban del peligro que suponía la proliferación de instalaciones en mal estado, teniendo en cuenta precedentes como el suceso ocurrido en Bunyola, donde un joven murió al entrar en contacto con una farola. "Se acabarán de retirar las farolas rotas y se colocarán nuevas", anunció el Consistorio.

De la reunión también salió el compromiso de que se estudiarán qué zonas deben pavimentarse por la presencia de baches y por el mal estado del asfalto.

Los vecinos carecen en la actualidad de una red municipal de agua potable y alcantarillado, y se ven obligados a contratatar y gestionar sus propios depósitos, lo que ha sido un motivo de denuncia vecinal.

Estado de redes

Respecto al sistema de agua potable, el Consistorio informó de que "el sondeo hecho en el Coll de'n Claret no tiene caudal suficiente y, por eso, se estudian opciones de complementarlo con otras perforaciones o de canalizar agua desde otros sitios".

Por lo que se refiere a la red de alcantarillado, los representantes de la administración señalaron que ha habido un cambio de planes respecto a lo inicialmente dispuesto por el Ejecutivo autonómico.

De esta forma, si en un principio se habló de que se crearía una nueva depuradora, las directrices actuales marcan en cambio que las aguas sucias se conduzcan hasta la planta ya existente en el pueblo. De forma paralela, se ha encargado un estudio de precios del suministro de agua hasta George Sand, a fin de saber el alcance que tendría la entrada en vigor del nuevo servicio.

Otra preocupación vecinal tenía que ver con la carretera de acceso a la urbanización, que se encuentra en un deficiente estado de conservación.

En la reunión, se informó de que existe un compromiso del departamento de Carreteras del Consell de Mallorca por el que, cada año, se haría un tramo de ampliación de la calzada. Ahora se solicitará a este departamento a ver si es posible que el siguiente tramo comience desde el acceso de la urbanización hacia Valldemossa.