Las locomotoras del Ferrocarril de Sóller permanecerán en sus cocheras hasta el próximo uno de febrero, con motivo de la parada anual durante la cual serán renovados varios tramos de vías que sumarán más de 1.500 metros lineales de rieles.
Los trabajos, que comenzaron el pasado martes, se localizarán esta semana en la zona del Pujol den Banya, un lugar donde hay un cruce de vías y los trenes turísticos hacen una parada para que los viajeros contemplen la panorámica del valle. Los operarios trabajan en el interior de un túnel que está junto al mirador donde ya han retirado las viejas traviesas, raíles y el balasto. Antes de colocar el nuevo material, los operarios instalarán una tela impermeabilizante para evitar que la humedad dañe las traviesas de madera nuevas que se colocarán en el túnel. Según la compañía, durante los dos meses en los que no habrá servicio se renovarán varios tramos del trazado entre Sóller y Palma. En enero el tranvía suspenderá sus servicios con el Port porque se renovará por completo el trazado de las vías que discurren por la calle Romaguera y la avenida de Cristòfol Colom.
