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El crepúsculo de la Mallorca del pasado: estos son los edificios abandonados más singulares de la isla

La exposición fotográfica ‘Arquitecturas vacías’, de Lluís Bort, ofrece una reflexión sobre emblemáticas construcciones de la isla en desuso desde hace años, como la discoteca Dhraa o es Sindicat de Felanitx

Es Fogueró, en Alcúdia

Es Fogueró, en Alcúdia / Lluís Bort

Redacción

Existe una Mallorca del pasado que se erige de forma crespuscular a lo largo de los paisajes bucólicos y transformados de la actualidad. Una Mallorca bonita a su manera, pero degradada. No son yacimientos arqueológicos, porque pertenecen a un pasado no muy lejano.

La antigua discoteca Dhraa

La antigua discoteca Dhraa / Lluís Bort

Tienen la forma de grandes construcciones abandonadas, muchas de ellas con alto valor patrimonial, que en otros tiempos acogieron algunas de las principales salas de fiesta de la isla; actividades industriales; plantas de generación de energía; bodegas; eventos deportivos…

Son vestigios de una Mallorca que ya no existe, aunque en algunos casos, las administraciones públicas intentan darles una segunda vida, con resultado desigual por el momento.

En este tipo de edificaciones se ha centrado durante el último lustro el foco del arquitecto y fotógrafo de arquitectura Lluís Bort, originario de un pueblo de Castellón, quien ha emprendido el proyecto ‘Arquitecturas vacías’ en que reúne una colección de imágenes de lugares como la antigua discoteca de es Fogueró de Alcúdia, la bodega de vino de es Sindicat de Felanitx, la Fàbrica Nova de Sóller o la central térmica de Aucanada de Alcúdia, entre otros sitios emblemáticos de la isla.

Central térmica de Aucanada, en Alcúdia

Central térmica de Aucanada, en Alcúdia / Lluís Bort

La exposición ya se ha podido visitar en las sedes de colegios oficiales de arquitectos de Palma, Castellón, Valencia y de Tarragona. Próximamente, también se expondrá en Girona.

Bort explica cómo surgió la idea de emprender esta reflexión personal, acerca de los edificios singulares abandonados en Mallorca.

Edificio de Gesa

"La idea surgió a raíz de una fotografía que me imaginé del edificio de Gesa. Me la imaginaba buscando el reflejo del sol sobre la fachada. La hice, pero no me gustaba el efecto. Me esperé un poco más. Y finalmente apareció. Toda la fachada adquirió este tono más dorado que yo buscaba. A raíz de eso, investigué sobre la historia del edificio de Gesa. Entonces, se me ocurrió buscar otros edificios abandonados en Mallorca. Y comencé a descubrirlos", asegura.

Bodega cooperativa de es Sindicat de Felanitx

Bodega cooperativa de es Sindicat de Felanitx / Lluís Bort

La técnica fotográfica fue clave para su trabajo, según destaca. "Para poder darle una uniformidad a todo él donde hay diferentes tipologías decidí fotografiar cada edificio durante la hora dorada dependiente de su orientación. De este modo, cada edificio se presenta como una joya arquitectónica sobre un cielo azul intenso y degradado que permite reflejar la belleza de cada uno de ellos", explica.

Discoteca Dhraa

Él detalla que de todos los edificios que ha fotografiado uno de los que más le impactó fue la mítica discoteca Dhraa, famosa entre mediados de los ochenta y principios de los noventa del siglo pasado por sus fiestas temáticas y los conciertos veraniegos de artistas internacionales.

Precisamente, hace un par de años, los nuevos propietarios alemanes del complejo anunciaron su reapertura, que de momento aún no se ha producido.

"Me impactó por la magnitud que tenía y la historia que había detrás. La verdad es que me sorprendió", dice. Se da la circunstancia de que, en su trabajo, aparece otra sala de fiestas histórica, como la de es Fogueró de Alcúdia.

Cuando se le pregunta por qué cree que estos espacios de ocio nocturno no han tenido recorrido en una isla consagrada al turismo, Bort apunta la idea de que son espacios que necesitarían una fuerte inversión económica.

Igualmente, destaca el impacto que le produjo la antigua macrobodega de es Sindicat de Felanitx, que hace un tiempo adquirió el Consell de Mallorca y que está catalogada como Bien de Interés Cultural (BIC).

"Ver esos espacios, esos depósitos tan grandes... ¡Era el celler de Mallorca!", enfatiza el autor del proyecto, que menciona también el velódromo de Palma, que se ubica en una ubicación "privilegiada" de la ciudad.

Proyectos de rehabilitación

Este arquitecto recalca que ‘Arquitecturas vacías’ no puede verse solamente como un catálogo fotográfico sobre edificios abandonados de Mallorca, sino que aspira a introducir elementos de reflexión sobre el futuro de estos espacios y el papel de la ciudadanía para definir sus futuros usos.

Destilerías Fuster

Destilerías Fuster / Lluís Bort

"Pueden tener una segunda vida, haciendo estudio de necesidades. Se podrían plantear unas jornadas de participación ciudadana para que los vecinos puedan aportar sus visiones y hacerlos partícipes del proyecto. Así vas conociendo qué pueden necesitar. Y sentirán más suyo el proyecto que no si viene inversor y hace lo que quiere", arguye Bort, quien agrega que, desde que hizo el trabajo, ha habido cambios en la situación de algunas de estas construcciones gracias a la implicación institucional, algo que aplaude.

Central de Aucanada

Por ejemplo, en 2022, el Consell formalizó la compra de la central térmica de Aucanada por 300.000 euros, después de haber ejercido el derecho de tanteo y retracto para asegurarse la propiedad ante el interés de otros posibles compradores. El objetivo, reconvertirlo en un "centro tecnológico de referencia en la descarbonización del mar", como dijo en un acto oficial la entonces presidenta, Francina Armengol. Allí se invertirán unos 4,5 millones de euros procedentes de los Fondos de Transición Justa aportados por el Estado para compensar a las comunidades afectadas por el cierre de centrales térmicas.

Por otra parte, también en 2022, el Ayuntamiento de Santa Margalida se hizo con el conjunto patrimonial del que forman parte las célebres Destilerías Fuster, cuyo origen se remonta a principios de la década del siglo veinte. Queda por ver qué recorrido tienen estas construcciones en su segunda vida y si éstas dejan atrás su luz crespuscular.

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