La Congregación de los Misioneros dels Sagrats Cors, conocidos popularmente como los Coritos, ya ha hecho público que abandona el Monasterio de Lluc (Escorca). La avanzada edad de los sacerdotes y la falta de vocaciones mallorquinas ha hecho que los responsables de la Congregación, que tiene su sede central en el monasterio de La Real de Palma, comunique al Obispado la imposibilidad de seguir al frente de la Administración de Lluc. Tanto la congregación de los Misioners dels Sagrats Cors como la diócesis de Mallorca han garantizado la continuidad de la emblemática Escolanía y de los Blavets.

Tras 128 años afincados en Lluc, la Congregación no puede continuar realizando su labor religiosa en el monasterio más venerado. Tras la Seu de Mallorca, Lluc es el lugar de culto más visitado en nuestra isla.

En la actualidad solo quedan seis sacerdotes de los Coritos en Lluc, todos ellos de avanzada edad, que necesitan asistencia y no pueden permanecer en el monasterio. La falta de vocaciones de religiosos en Mallorca, una de las condiciones de los Coritos de Lluc, ha impedido que entrara gente más joven para sustituir a los más mayores. Por todo ello, ahora será el obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, quien tendrá que decidir quien se encargará de la asistencia religiosa y de la Escolania de Lluc con los populares Blavets.

"Las razones que nos llevan a tomar una decisión así se resumen en constatar la escasez de personal causada por la falta de vocaciones mallorquinas que la Congregación padece hace ya muchos años", aseguran desde la Congregación en un Comunicado.

Los MSSCC se hicieron cargo de la administración del Santuario de Lluc en el año 1891 -apenas un año después de su fundación en 1890- atendiendo a la solicitud de quien era entonces Obispo de Mallorca D. Jacinto Mª Cervera. Desde entonces, los MSSCC -conocidos precisamente en Mallorca como 'Els Pares de Lluc'- han trabajado incansablemente para que el Santuario de Lluc fuese realmente la 'Casa Pairal de tots els mallorquins', desarrollando una meritoria labor que ha implicado tanto el sostenimiento material como la dimensión pastoral y espiritual de la Casa de la Moreneta, la Mare de Déu de Lluc .

La decisión fue tomada por la Congregación el pasado 3 de enero y fue comunicada al Obispado el 16 de enero. El Obispado ha expresado hoy su "sorpresa y dolor" por el anuncio y ha admitido que decidir quién se encargará de la atención del Santuari en las "diversas áreas" será "un nuevo reto" para la Diócesis.

Cabe la posibilidad de que el Obispado envíe a sacerdotes que no pertenezcan a la Congregación de los Misioneros dels Sagrats Cors para oficiar las misas y celebraciones religiosas en el Monasterio de Lluc.