Escándalo institucional

Armengol descoloca a Prohens con su propuesta de pacto para echar a Le Senne

La secretaria general del PSIB-PSOE ofrece a la presidenta del Govern los votos de los socialistas sin condiciones para cesar al ultraconservador nLa líder popular lo rechaza y lo mantiene al frente de la Cámara

El presidente del Parlament, Le Senne; la presidenta del Govern, Marga Prohens, y la secretaria del PSIB, Francina Armengol, junto a la reina Sofía.

El presidente del Parlament, Le Senne; la presidenta del Govern, Marga Prohens, y la secretaria del PSIB, Francina Armengol, junto a la reina Sofía. / Manu Mielniezuk

Andrés Martínez

Andrés Martínez

La presidenta del Congreso de los Diputados y secretaria general del PSIB-PSOE, Francina Armengol, descoloca a la presidenta del Govern, Marga Prohens, con su propuesta pactada para echar a Le Senne del cargo tras destrozar en el pleno la fotografía de Aurora Picornell, el gran icono de la represión franquista en Mallorca. Una semana después del incidente, Armengol ofreció ayer los votos de los socialistas sin condiciones para destituir al ultraconservador como presidente del Parlament, aunque fuera a costa de apoyar a un sustituto del PP. Una oferta que los populares rechazaron de manera inmediata, conscientes de que aceptarla podría suponer abrir una crisis con sus socios de Vox y acabar con el pacto de investidura firmado entre ambos.

Armengol reunió de urgencia a la Comisión Ejecutiva de su partido ante la «emergencia democrática» que atraviesa Balears. La propuesta que salió del encuentro fue contundente: el PSIB-PSOE pone a disposición sus votos en el Parlament para destituir a Le Senne, comprometiéndose a apoyar que el nuevo presidente de la Cámara autonómica sea del Partido Popular, sea cual sea el nombre del candidato.

El apoyo del PSOE en esta cuestión sería indispensable para que el PP pudiera cesar al ultraconservador sin el apoyo de Vox, quien ya ha mostrado su total apoyo al gesto que tuvo en el hemiciclo. Por su parte, Més per Mallorca también ofreció la semana pasada sus votos al PP para destituir a Le Senne del cargo. «En un momento extraordinario que está afectando a nuestra democracia, estamos dispuestos a ceder los votos necesarios al Grupo Popular para que una persona de su grupo pueda retornar la dignidad democrática al Parlament y que Le Senne haga efectiva su dimisión de manera inmediata», detalló Armengol.

Nervios en el Consolat

El movimiento descolocó a los miembros del Consolat, muy nerviosos al ver que esta propuesta se convirtió en noticia a nivel nacional con los diferentes medios de comunicación abriendo sus programas y cuestionando si el PP no debería aceptarla para destituir a Le Senne. Sin embargo, el PP rechazó rápidamente la proposición conocedor de las consecuencias políticas que le podría suponer en su alianza con Vox.

Cabe recordar que en el preacuerdo firmado entre ambos se dejaba constancia de que la presidencia del Parlament debía recaer en manos de los de Abascal. Así, el portavoz de los populares en el Parlament, Sebastià Sagreras, argumentó que el ofrecimiento de los socialistas «no tiene ninguna credibilidad» a la hora de ofrecer votos y pidió a Armengol «que no contribuya» a aumentar la crispación en Balears. «Desde el PP hemos condenado de forma contundente los hechos lamentables que ocurrieron. Lo que pedimos a todos los grupos es que ayuden a rebajar la tensión ante un clima irrespirable en el Parlament, también le pedimos a Armengol que reflexione y no contribuya a esta crispación que no se merecen los ciudadanos».

Por su parte, el portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, tachó de «chiste» y de «ocurrencia» la propuesta de Armengol. «No es la persona más adecuada para dar lecciones». Según defendió Tellado , la oferta de la secretaria general del PSIB «no tiene precedentes», afirmando que sus declaraciones «rozan el ridículo más absoluto».

En el caso de Vox, denunciaron que la iniciativa socialista no es más que «una cortina de humo para desviar la atención de los casos de corrupción que rodean a Pedro Sánchez y su gobierno». Un escrito donde los ultraderechistas no nombraron ni una sola vez al propio Le Senne ni tampoco a Aurora Picornell, cuyo retrato destrozó en el hemiciclo.

Quien sí se pronunció respecto a Picornell fue la portavoz de los ultraconservadores en la Cámara autonómica, Manuela Cañadas, negando que una de les ‘Roges del Molinar’ fuese víctima del franquismo. Así lo explicó Cañadas a través de sus redes sociales. «Aurora Picornell fue víctima de la Guerra Civil no del franquismo que empezó en el 39 y ella murió en el 37. Mentiras no PSOE. ¿Ignorancia o maldad?» aseguró a través de X (antes Twitter).