Adiós a los excesos en el mayor complejo hotelero de Magaluf

Después de su apertura en mayo, y tras una inversión de 20 millones, ayer fue «la puesta del largo» del que era el mayor complejo hotelero de Magaluf, supera el millar de habitaciones, transformado en tres establecimientos que dan la espalda al turismo de excesos. Bajo la gestión de Fergus Group, capitaneado por Pep Cañellas, la propiedad de la familia Matutes en Calvià abre una nueva etapa que sigue la estela de reposicionamiento del destino. 

Detrás queda la «etapa más dura» de lo que fue el BH Mallorca Resort, que explotaba el Grupo Cursach. El presidente de Fergus mostró los tres establecimientos en una visita institucional en la que participaron el conseller de Turismo, Jaume Bauzà, la directora insular de Turismo del Consell de Mallorca, Clara del Moral, el alcalde de Calvià, Juan Antonio Amengual, y el coronel jefe en Baleares de la Guardia Civil, Alejandro Hernández Mosquera. Este último acudió a título particular invitado por Cañellas y a él le agradeció el apoyo «ante cualquier incidente» vivido en la temporada pasada, cuando Fergus ya gestionó el complejo, en la que fue «una etapa más dura que esta». 

Cañellas da «totalmente por zanjado» el turismo de borrachera con la remodelación y transformación de los alojamientos. El Fergus Club Mallorca Waterpark, un cuatro estrellas con 656 habitaciones todo incluido, se dirige a un público familiar, cuenta con un parque acuático. Y el tent Calvià Beach, de 280 habitaciones, y el tent Mojito Suites, apartahotel con 120 habitaciones, ambos de tres estrellas, solo ofrecen alojamiento y desayuno. «Es un tipo de cliente que viene a disfrutar del destino, en ningún caso a emborracharse. Y es nuestra responsabilidad que así sea». 

El empresario recuerda que su compañía ya fue capaz «hace años de hacer un hotel cinco estrellas al final de Magaluf», en referencia al Tobago. «Ya es un ejemplo de reposicionamiento». Agradece «la apuesta y la confianza de la familia Matutes» y celebra poner «un granito de arena» para seguir con la transformación en el modelo de turismo del destino lejos del desenfreno. 

De seis a ocho meses de actividad

Los tres hoteles suman 1.056 habitaciones y dan empleo a unas 300 personas. Fergus alargará la temporada, pasando de seis a ocho meses de actividad. El fundador de la hotelera destaca que ya están logrando aumentar el rendimiento «sin traer más volumen de gente». La ocupación ronda el 80 % y el gasto medio supera el 40 % respecto al año pasado.

«Me habían hablado de lo que pasaba», dijo el conseller de Turismo en relación a los excesos que se producían cada verano en el antiguo BH. Por eso agradeció «la valentía» para sacar adelante este proyecto. Bauzà reiteró que las conductas incívicas «no las queremos» y se refirió al acompañamiento a la iniciativa privada para transformar Calvià con fondos europeos para erradicar establecimientos obsoletos. 

Hay que «concienciar al turista de que viene a un destino que tiene que cuidar como su casa», apunta Clara del Moral, quien coincidió con Bauzà en que no se busca convertir a las islas en «destinos elitistas, sino de calidad». 

Magaluf, que ha sido «maltratado y estigmatizado», consideró Amengual, «se estudiará en unos años» como ejemplo del paso de un destino maduro a otro emergente. El alcalde de Calvià también elogió la labor de la iniciativa privada, «que nos lleva unos cuantos pasos por delante», en la transformación de Magaluf, si bien mencionó la puesta en marcha de la reforma del paseo Marítimo .

Fergus Group, cadena creada en 2011, lleva invertidos más de 110 millones en proyectos de reposicionamiento hotelero. Opera 26 alojamientos repartidos por Baleares, Canarias, Andalucía y Cataluña.

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