Nuevo Incendio de contenedores en Palma: "Un hombre en bici eléctrica pasó tirando cócteles molotov"

"Escuché un bombazo. La policía nos dijo que un hombre pasó en una bicicleta eléctrica tirando cócteles molotov". Con estas palabras Rocío, la dueña de un Seat Ibiza blanco afectado por las llamas, definía los estragos causados de madrugada por el fuego al consumir una batería de contenedores en Palma. El incendio destrozó seis depósitos, causó daños a tres coches y a dos motos y afectó a la fachada y a los cristales de la Parroquia del Inmaculado Corazón de María.

El fuego se inició sobre las cuatro y media de la madrugada de este martes a la altura del número 95 de la calle Pablo Iglesias del barrio palmesano de Plaza de Toros. Una explosión sobresaltó a los vecinos antes de que las llamas en una batería de contenedores alcanzaran grandes proporciones. El fuego llegó a una altura de una decena de metros y se extendió tanto a tres coches y a dos motos estacionados enfrente y afectó a la fachada y a los cristales de la parroquia.

"Fue un bombazo", describía Rocío mientras miraba los destrozos causados por el fuego en la carrocería de su Seat Ibiza de color blanco. También la parte trasera de un Volkswagen Golf de color verde resultó alcanzada por el fuego. "Escuche un tremendo estruendo", afirmaba Maritza, vecina de la zona, al despertarse sobresaltada poco antes de iniciarse el incendio.

Una dotación de Bombers de Palma se personó poco tiempo después en el lugar de los hechos. Durante casi una hora, desde la cuatro y media de la madrugada a las cinco y veinticinco, estuvieron combatiendo el avance de las llamas. La principal preocupación era tratar de contener el fuego para evitar que se extendiera a más vehículos. Un total de tres coches y dos motos, así como la fachada de la parroquia, resultaron dañados. Una vez que el incendio ya estaba completamente extinguido, regresaron al parque.

Sustancia acelerante

Hasta el lugar del siniestro también acudieron efectivos de la Policía Local de Palma y agentes de la Policía Nacional. El escenario con los restos chamuscados de los depósitos quedó precintado para tratar de asegurar las pruebas. Investigadores del Grupo de Atracos de la Policía Nacional se han encargado del caso. Todos los indicios apuntan a que el fuego ha sido intencionado y que el incendiario habría empleado una sustancia acelerante. Incluso se hablaba de que podría tratarse de un individuo en una bicicleta eléctrica, que había arrojado un cóctel molotov sin ni siquiera detenerse.