Fernando Peralta era una de las atracciones del nuevo Mallorca de la presente temporada, porque está llamado a ser un hombre importante en el esquema de Cúper. Sin embargo, tras el partido de ayer ante el Deportivo, el lateral Manuel Pablo frenó la mayoría de las incursiones por la banda izquierda del argentino.

El defensa canario no tuvo excesivos problemas porque el ex jugador del Instituto de Córdoba no le encaró ni buscó el uno contra uno. Uno de los principales avales de Peralta es su velocidad, pero ayer no la explotó demasiado y, si no, el deportivista se encargaba de abortar cualquier intento de desborde del interior. El atacante, a pesar de tener mucha voluntad, estuvo espeso e impreciso en muchos pases y no encontró su sitio a lo largo de los noventa minutos del encuentro. Manuel Pablo, por su parte, tampoco dobló en su banda a Scaloni y eso que es uno de los laterales que más se suman al ataque del fútbol español.